Notas de vendaval

No culpo a los timbales de la pava, ellos tienen hambre. Y Ios tambores de la trampa, sé lo que desean, están vacíos también. Y los bombos retumbantes y atronadores, ellos son los más hambrientos de todos… Las aullantes lanzas del noroeste se extinguen. Las nanas del sudoeste tienen una oportunidad, una canción madre. Una luna de cuna pasea desde un agujero desgarrado en la bolsa de la cima del cielo.

 

traducción: Hugo Müller

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