Desayuno

De todas las comidas que satisfacen mi día la de la mañana es la mejor,

provista en una bandeja de plata, inmaculadamente vestida.

Me levanto cuando el amanecer está brillante, me arrojo al mar,

retornando con un raro deleite a la miel, tostada y té.

En mi mejor momento mi apetito era el filo de una navaja,

estaba abocado a los huevos y el tocino…

¡Oh!, la marcha del tiempo, porque ahora un viejo gentil genial,

con el diario sobre mis rodillas, bebo y tomo con enorme contento mi miel, tostada y té.
Entonces, para mi deleite coloquen la cosecha de la abeja, marrón,

tostada crujiente con manteca brillosa, dos tazas o tres de Ceilán.

Dejo que otros alaben el almuerzo o la cena, pero yo festejo con alegría

cuando recuerdo con mirada agradecida sólo miel, tostada y té.

 

traducción: Hugo Müller

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