Hojas

Las hojas están cayendo una a una,
cada una una vida para mí,
mientras prontamente en el sol
vuelan doradamente en espiral:
tan gallardas y cautelosas se bambolean libres.

Las hojas caen de dos en dos bajo un cielo funesto,
tan silenciosamente esparcen el césped,
mueren con reluctancia…
Hojas de rico carmesí, y ninguna lamenta su condena excepto yo.

Las hojas están cayendo de tres en tres
bajo la luna apolillada, plateadas revolotean hacia abajo
en silencioso rigodón, y yacen en el remoto bermejo seco
desde una melodía emplumada.

Las hojas esparcidas son innumerables, desconsoladamente muertas,
cuando brillante era su atavío selvático y luminosa era su huella,
se pudren bajo la amarga nieve, sin consuelo.

Una hoja es una vida, y una por una fluyen cada día oscuro,
raras amigas lujuriosas en el sol y deshilachándose rápidamente…
¡Qué tristemente pronto la luna lamentará mi oscura decadencia!

traducción: Hugo Müller

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