El capitalismo lowcostizado de Macri

Crisis endémica, pandémica y estructural. El carácter miserable y exterminador del sistema se halla en un punto interesante de ebullición. El despotismo y desigualdades de las democracias modernas asquea: la sociedad se organiza en torno al consumismo deleznable. Las embestidas del lawfare criollo, encabezadas por Bonadío y varios jueces federales, bajo las instrucciones de la CIA y con la obscena intervención del poder ejecutivo y su vergonzante ministro de justicia, más el aval de la militante PRO jefa de la Oficina de Anticorrupción, son difundidas minuto a minuto por el aparato de medios del gobierno, al servicio del capitalismo salvaje.

¿Qué han impuesto?, ¿qué han hecho? Estados Unidos se aseguró su objetivo militar: ahora puede manejar a Brasil y Argentina como colonias, como en la época de gobiernos militares. Y todavía mejor ahora: Trump está hecho a imagen y semejanza de sus títeres locales (o viceversa). Aspirar a enriquecerse turbiamente y hablar gansadas, arrepentirse luego de los chanchullos parece ser la fórmula. Chanchadas y delitos de cuello blanco por todos lados. Aportantes truchos y contratación de seguridad privada. Apoyo logístico de terroristas yanquis e israelíes. Si no alcanza con gendarmes asesinos lobotomizados ya pueden salir los milicos a la calle a torturar opositores. Eso es lo que se merece Milagro Sala, que ya está a punto caramelo para suicidarse. El gobernador Morales va a salir ganando en ésta y nadie se lo va a recriminar. Hace lo que quiere con la vida de esta valiente caudilla jujeña, la somete a todo tipo de ultrajes y lo hace en estilo circense. Ya los ideólogos de comunicación del gobierno no se preocupan por ocultar su cinismo y su raigambre patricia. Son empresarios de circos plagados de irregularidades. A la vez han implantado el medioevo con sus pensamientos trogloditas. Savonarolas prepotentes de modos trumperos y mesadineristas expertos en fugas de divisas gozan de un statu-quo genial, óptimo para intelectuales de la talla de Durán Barba. Liberalizar completamente la compra-venta de dólares ha traído sus consecuencias. Endeudarse con el FMI y congeniar con fondos buitres no es un buen síntoma para la economía del país, y mucho menos lo son los miles de argentinos y argentinas que cotidianamente están pasando a la categoría de mendigos, siendo su único proyecto de vida hacerse paqueros, motochorros u obreros buchones explotados.

La recesión, la estanflación, la malaria y la mishiadura, el enojo y el hartazgo, necesitan ser canalizados por alguna vía. Por eso en el área de transporte se ha desarrollado un mercado que ofrece pasajes por 1$ peso en Flybondi al fin del mundo. Aerolíneas, la línea aérea de bandera, copia la estrategia comercial y ya vuela a todo el país por precios irrisorios. A la población hay que desagotarla. La globalización impulsa movimientos migratorios. Ahora el mundo ofrece herramientas para poder instalarse en cualquier lado. Son todos lugares comunes con los que se construye la trata de personas: esencia y sangre del capitalismo. ¿Hay necesidad de promover el desastre con tanto entusiasmo?, ¿no son una señal de alerta los dos docentes muertos por un escape de gas en una escuela de Moreno? ¿No son suficientes los resultados negativos de todos los estudios y análisis de impacto ambiental para desechar la idea siniestra de operar estos aviones de low cost en el aeropuerto de El Palomar? ¿Será la próxima tragedia el inicio del fin del insoportable macrismo? ¿Por dónde ha de explotar esta maraña de Lebacs, inflación galopante, desocupación juvenil y femenina disparadas? ¿Van a seguir luchando por la despenalización del aborto? ¿Cómo se puede desentrañar el futuro de una gestión que practica y combina el neoliberalismo mafioso con el cualquiercosismo cultural? El modelo de volar barato se traslada a los alimentos y a otros mercados al borde de la extinción. La comida podrida y vencida que el gobierno reparte entre los hambrientos también cuesta menos, y esa es una ventaja competitiva insuperable del gobierno de Cambiemos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *