El negocio
Mientras me dirigía a St. Ives encontré un hombre con siete vidas,
siete vidas en siete sacos, como siete hembras en siete bastidores.
El ofrecía en venta estas siete vidas, pero no podía decir cuál era la mejor.
El juró que con cualquiera sería feliz para siempre,
yo compré las siete y pensé que era inteligente,
pero no puedo olvidar sus palabras de despedida:
para siempre no es todavía ahora.
Ogden Nash, trad. HM