Carpe diem
Un viejo vio dos niños callados amándose al atardecer,
no sabía si eran o no del pueblo,
o (estaban repicando las campanas) de la iglesia,
esperó (eran extranjeros) hasta que estuvieran fuera de escucha
para desearles a ambos que sean felices.
‘Sean felices, felices, felices, y tomen el día de placer’.
El tema de la edad es de la Edad.
‘Fue la Edad impuesta en poemas, su carga de rosas juntadas
para alertar a los sorprendidos amantes
del peligro de sobrecargarse con felicidad.
Y aún desconocer que la tenían.
¿Pero se podría decir que la vida toma el presente?
Siempre se vive menos en el presente que en el futuro,
y menos en ambos que en el pasado.
El presente es demasiado para los sentidos, muy ruidoso, muy confuso,
demasiado presente para ser imaginado.
poema de Robert Frost, traducido por HM