Una Balada Oriental
Yo hablo del amor que viene a la mente:
la luna es fiel, aunque ciega;
se mueve en pensamiento, no puede hablar.
El cuidado perfecto la ha hecho fría.
Nunca soñé el mar tan profundo,
la tierra tan oscura; tan largo mi sueño,
me he transformado en otro chico.
Me desperté para ver al mundo volverse salvaje.