noches y años

Los días del infierno llegan a tiempo, antes de lo programado. Y las noches del infierno. Y los años del infierno. El infierno que carcome como una rata en tu barriga. El infierno interior. El infierno exterior. Estas pobres palabras, lanzadas al infierno de contrabando, golpean tontamente. Salgo a la noche, miro. Hasta las palmeras gritan su agonía. El mundo está siendo machacado por una fuerza insensible. Entro, cierro la puerta. En esta máquina, escribo estas palabras para nadie. El sol está muerto. El día esta muerto, los vivos están muertos. Sólo el infierno sigue viviendo.

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