Los puertos de Cezanne
En primer plano vemos el tiempo y la vida
barridos en una carrera
hacia la izquierda de la imagen
donde se juntan las orillas.
Pero aquel lugar de encuentro no está representado;
no ocurre en el lienzo.
Al otro lado de la bahía
están el Cielo y la Eternidad,
con una sombría neblina blanca sobre sus montañas.
Y la inmensa agua del estanque es un intermediario
para los diminutos botes a remo.