Cuarto piso, amanecer, despierto toda la noche escribiendo cartas
Los pichones sacuden sus alas en el techo de la iglesia de cobre,
afuera de mi ventana, cruzando la calle, un pájaro posado en la cruz
examina las nubes tristes y grises de la ciudad.
Larry Rivers vendrá a las 10 am y me sacará una foto.
Yo tomo su foto, pichones. Los escribo, Amanecer.
Estoy inmortalizando su colectivo exhausto por la avenida.
¡Oh Pensamiento, ahora tendrás que pensar la misma cosa por siempre!